lunes, 24 de junio de 2013

La soledad del buscador de empleo

Recordando el clásico cinematográfico de los años 60 “La soledad del corredor de fondo”- cinta que espero ver en breve de nuevo, porque ya ni me acuerdo del argumento- he decidido cambiar un poco el título y hablar de “la soledad del buscador de empleo”, temática que, desgraciadamente, lleva unos años de máximo interés. Hoy no voy a dar consejos sobre cómo buscar activamente empleo de forma individual, sobre el currículum, la marca personal o la entrevista de trabajo. Hoy quiero hablarles sobre la cooperación en la búsqueda de empleo.

Nos han dicho tantas veces que el esfuerzo es individual, que los méritos son individuales, que nos hemos creído que si vamos cada uno a lo suyo, nos irá mejor. Es curioso, porque la historia de la humanidad es la historia de la cooperación: cooperar para construir un edificio, para dirigir un hospital o, simplemente, cooperar en el ámbito familiar. Si piensan por un momento, la división del trabajo no es otra cosa que la cooperación de unos con otros para sobrevivir en la sociedad que nos envuelve. ¿Puede un individuo vivir solo, completamente solo? Difícil, dependemos de los demás y los demás dependen de nosotros.

La red social que nos ayuda a cada uno, desde la citada familia hasta el estado del bienestar, no es otra cosa que una serie de mecanismos para evitar el daño o, en último lugar, esquivar eso tan innombrable que es la muerte. Entonces, cuando uno decide buscar empleo, ¿por qué no se apoya en redes?, ¿por qué no coopera con otros? No lo entiendo. Hace poco, en diversas entrevistas que estoy organizando  a través de Internet y que tienen por nombre “Videodebates sobre empleo”, tuve la ocasión de charlar con unos profesionales que han decidido cooperar en su búsqueda de empleo. Su proyecto se llama “No quiero ser portada de los lunes al sol” y, acertadamente, se basa en crear sinergias entre sus miembros para sumar esfuerzos usando para ello Internet y las redes sociales. Así, ganan visibilidad.  Cada persona es un mundo, pero juntos pueden más y, seguramente, los resultados que obtendrán como grupo serán infinitamente mayores que los que cada uno, de forma individual, podría conseguir. Desde aquí mi enhorabuena y mi total apoyo a su proyecto.

Si para cada oferta de empleo se presentan centenares de personas, ¿cuál es la probabilidad de que uno solo, completamente solo, consiga el puesto? Desde distintas instancias nos hablan de diferenciarnos, pero, al fin y al cabo, esto desemboca en la guerra del “todos contra todos”. Aunque cada uno mire por su interés, ¿no necesitamos ayuda? ¿Qué es la red de contactos o Networking sino un colchón que nos puede ayudar a amortiguar el golpe? Pero no, parece que el pensamiento reinante es el de las competiciones deportivas: quien gana se lo lleva todo; quien pierde, lo pierde todo. Mal vamos. Piensen en los grandes proyectos empresariales que han triunfado. Se dice que es un empresario individual el que lo consiguió, pero siempre contó con la familia, con amigos o con socios. Si rascan un poco en el mundo laboral, las carreras exitosas están llenas de gente cooperando, a pesar de que en el imaginario colectivo es el individuo solitario el que triunfa. Con esto no quiero quitar el mérito individual, ni mucho menos, sólo contextualizar que si nos soltaran en una isla desierta, poco logros podríamos tener.

El desempleo es un drama que cada uno vive en su ámbito privado como puede. Levantarse por las mañanas desempleado y mirarse al espejo es un golpe duro.  Por ejemplo, es un drama familiar por la falta de ingresos económicos; es un problema psicológico si se alarga mucho la situación, debido a una sensación de exclusión y de sentirse “inútil”; y sumando todas estas situaciones, es un drama colectivo que carcome el país.

Por lo general, cuando se busca trabajo, lo mejor que se puede hacer es que todo el mundo conozca su perfil profesional, que sepan que está “activamente” buscando algo. Esto no va a quitar los problemas macroeconómicos de España, pero el trabajo colectivo, el apoyo mutuo en épocas de necesidad, es la única salida que puede hacernos ver luz al final del túnel, ya sea para buscar empleo, crear una empresa o luchar por vivir mejor.

@Hecjer

No hay comentarios:

Publicar un comentario

"¿El fin de la Historia?" Síntesis del artículo de Fukuyama

  Fukuyama publicó el artículo “¿El fin de la historia?” en 1990. Hacía poco tiempo que cayó el muro de Berlín,  por lo que parece que la ge...