El portal de empleo Infojobs publicó hace tiempo una información en la que alertaba sobre la creciente
precariedad en el empleo. Según ellos, España “necesitaría otra reforma laboral, pero dentro de un plan general de
recuperación que apostara por la industria, la protección del empleo estable,
el castigo al empleo temporal y persecución del empleo sumergido, entre otras
medidas.”
El 23,6% de los asalariados trabaja con
un contrato temporal. Una situación que tiene visos de ampliarse conforme
vayan pasando los años. Es inevitable. La flexibilidad impuesta en España sólo
nos lleva a un incremento de la temporalidad y a una reducción de salarios. Sin
embargo, no se ha terminado de plantear el debate no sólo sobre el modelo
productivo, la formación o las políticas activas de empleo, sino también sobre cómo
paliar la situación de aquellos trabajadores cuyos salarios son de miseria.
Martín Carnoy, en su libro “El trabajo flexible en la era de la información”
nos habla sobre dos tipos de
flexibilidad: la buena y la mala, la mejor vía y la vía secundaria:
- La mejor vía se centraría en desarrollar entornos laborales de elevado rendimiento basados en la formación y participación de los trabajadores, los incentivos salariales y la seguridad en el empleo. Los trabajos manuales y no manuales se reorganizan en torno a nuevas formas del modelo de trabajo no manual en el que los trabajadores persiguen objetivos de rendimiento individuales y colectivos y son recompensados por logarlos y en el que los trabajadores no perciben como amenaza la flexibilidad y la fluidez.
- La vía secundaria – la mala-, se basaría en la reducción de costes laborales mediante subcontratación del trabajo, contratos laborales eventuales y a tiempo parcial y presiones al gobierno para que reduzca los salarios mínimos reales y el poder de los sindicatos.
Parte del batacazo del Partido Popular en las anteriores elecciones,
además de por sus casos de corrupción, tiene que ver mucho con la falta de
credibilidad que tiene el gobierno cuando habla de recuperación. ¿Qué
recuperación?, ¿para quiénes?, ¿qué pasa con la precariedad y el incremento de
la pobreza? Según el Instituto Nacional de Estadística, “el 22% de españoles vive bajo el umbral de la pobreza. El porcentajede pobres sube a 29,2% si a las bajas rentas se añaden los hogares concarencias materiales”. Esta tasa se incrementa hasta el 30% si hablamos de
menores de 16 años.
Estamos llegando a un momento en que tener trabajo no supone
asegurarnos una inserción social, y esto debe ser abordado urgentemente por las
administraciones. Lo demás -peleas vacías entre políticos aburridos- es perder el tiempo y permitir que se vaya
creando una bolsa de indignación cada vez mayor que nadie sabe cómo ni cuándo
explotará.
Desde rentas básicas hasta trabajo garantizado, pasando por
complementar aquellos salarios más bajos con ayudas públicas, las propuestas
políticas de las distintas formaciones que concurren a las elecciones se han
ido exponiendo públicamente. No obstante, parece que no terminamos de
analizarlas en condiciones, dedicando más tiempo a cuestiones amarillistas y
marrulleras de la política en vez de intentar solucionar problemas de una
puñetera vez.
Quiero poner mi grano de arena a este debate. Me gustaría
conocer vuestra opinión. En primer lugar, os pregunto qué propuestas tenéis
para reducir el paro. En segundo lugar, me gustaría conocer que pensáis
sobre la precariedad y las medidas que se pueden adoptar por parte de las administraciones
para paliar este problema. Las conclusiones
del debate serán expuestas en una entrada
dedicada especialmente a este tema en el blog.
Propuestas para bajar
el paro
Propuestas para
luchar contra la temporalidad y la precariedad
Os dejo un enlace de interés
Es una obviedad que lo del desempleo es una cuestión complicada que sufren muchos países y para la que nadie parece tener una solución clara o, cuando menos, una solución única. Desde mi punto de vista quien mejor ha llevado la lucha contra el desempleo en esta crisis es U.S. y quizá deberíamos ver que hicieron y cómo lo hicieron.
ResponderEliminarNo se me ocurre ninguna solución al desempleo que se encuentre fuera de la tecnología. Ni fuera de la formación. E, incluso, no se me ocurre mejor respuesta al desempleo que tratar de ofertar formación utilizando el entorno tecnológico de la sociedad digital.
Con ánimo de no extenderme me gustaría decir que, desde mi modesto punto de vista, vivimos en una sociedad que no genera empleo para todos. Y no se trata de distribuirlo (eso casi nunca ha funcionado) se trata de distribuir lo que el empleo genera, lo que generamos con la actividad económica de todos.
Gracias por el artículo y por el debate Héctor.
Muchas gracias, Xose. Totalmente de acuerdo, creo que no sólo hay que apostar por la formación, sino incluso debatir más sobre le reparto de la riqueza. Un saludo y gracias por tu aportación!
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