Hace unas semanas me hice con un libro
coordinado por César Calderón y Sebastián Lorenzo titulado “Open Government” (Gobierno Abierto). Con
diversas aportaciones interesantes, el libro establece una serie de reflexiones
sobre qué es el Gobierno Abierto y cuáles son los principios que deben regir en
una administración que se quiera abrir a los ciudadanos utilizando, como no
podía ser de otra manera, aquellas herramientas que la tecnología pone a
nuestro servicio.
Está claro que gran parte de la desafección
política existente se debe a que los gobernantes no están cumpliendo su parte del trato establecido con la
ciudadanía: trabajar por el bien común. El político está para gestionar la
“cosa pública” atendiendo al criterio de servicio, no para dar órdenes y mandar
como si los demás le debieran cortesía, sin contar con los elementos de
corrupción que se conocen. Todo esto unido a la crisis, nos pone en una
situación complicada. Los partidos políticos son organizaciones cerradas, como
las listas que se presentan a las elecciones, cuyo objetivo, en su mayoría, es
mantenerse en el poder o conseguirlo. Está muy bien, porque es necesario
presentarse y ganar, pero es hora de abrir las ventanas y favorecer la
participación de la gente sin necesidad de tener un carné de un partido u otro,
o llevarse
bien con el dirigente de turno.
Los partidos
políticos cumplían la función de organización de las personas para canalizar sus demandas, a la vez
que se convertían en espacios que informaban y formaban a su militancia o
simpatizantes atendiendo a principios ideológicos. Pero eso hoy en día ha
cambiado; la información circula libre por la red, un canal horizontal y nada
jerárquico que permite participar en la generación y dinamización de contenidos como nunca antes se había hecho.
Incluso podemos hablar de nuevos movimientos sociales en la era de Internet, parafraseando un poco al sociólogo ManuelCastells.
¿Cómo mejorar
entonces la democracia? Pues podemos empezar abriendo el gobierno.
Diremos que el Gobierno Abierto es aquel que conversa con el ciudadano. Para ello
habrá que establecer espacios comunes de encuentro. Para que fluya bien la
conversación, está claro que es necesaria una mayor transparencia mostrando así
los datos públicos a la consulta de cualquier interesado. Internet y la web
2.0, como elementos que hunden sus raíces en el concepto de participación y
bidireccionalidad, parecen elementos que vienen como anillo al dedo a este
innovador concepto de democracia. A través de Internet, el ciudadano se
informa, se conecta y consulta información. Ésa es la labor de un canal neutral
(por ahora) en sus contenidos, pero muy potente a la hora de construir
comunidades y espacios.
El libro establece (página 18) tres ejes centrales que definen el Open
Goverment. A saber:
- Transparencia. ¿ En que se gastan nuestros impuestos? Si los datos son públicos, ¿por qué no se organizan y se permite su consulta (lo que se conoce también como el Open Data)?
- Participación. Ya no vale con votar cada cuatro años y sentarnos a ver qué pasa. Es hora de consultar a la ciudadanía sobre más aspectos de la gestión de lo público.
- Colaboración. Internet elimina distancias, ¿por qué no utilizarlo para abrir canales de colaboración entre administraciones (local, autonómica y estatal), entre empresas y ciudadanos, o entre ciudadanos y administraciones?
Hay que romper con la anomia ciudadana y esa
apatía a la hora de participar en política, cultura heredada de la época de la
dictadura de Franco. El ciudadano tiene que involucrarse, pero para ello hay
que ofrecerle canales y herramientas que se adapten a él, y no obligar a que
todos nos adaptemos a las organizaciones que lideran otros. Evaluación,
control, participación, transparencia, escucha activa… son palabras que deben
situarse en primera línea de la política.
Algunos ejemplos
de gobierno abierto:
En relación a esos "ejes centrales que definen el Open Government"... conviene echar un vistazo a su valoración crítica en esta entrada:
ResponderEliminar"Gobierno Abierto más alla de la transparencia"
http://rumboalorien.kyopol.net/gobierno-abierto-mas-alla-de-la-transparencia/
Gracias por el comentario, Pedro. La entrada que has compartido es muy interesante, y amplía bastante la información sobre el concepto de Gobierno Abierto y todas sus vicisitudes.
ResponderEliminarUn saludo.